Espacio para convivir, lugar para relajarte

Con vistas al agua turquesa, palmeras frondosas y cielos brillantes, el interior y el exterior se mezclan a la perfección en este espacio compartido y acogedor.

Es el escenario ideal para todo, desde el café de la mañana hasta las margaritas al atardecer.

Este espacio está hecho para días tranquilos y noches memorables, con espacio para estirarte, relajarte y sentirte como en casa. Abre las puertas al patio techado y deja que la brisa traiga consigo el sonido de la playa.

Relájate en el rincón de la biblioteca con un buen libro en una de las sillas reclinables de piel o pon una película en la pantalla inteligente de 55”. ¡Hasta dejamos palomitas en la cocina para ti!

Reúnanse alrededor de la hermosa mesa de madera hecha por artesanos locales para comer, jugar o platicar hasta tarde. Con el océano justo más allá de las ventanas y los platanales meciéndose afuera, cada momento se siente un poco más especial.

Los tres sillones también se convierten en camas, para acomodar a grupos grandes con facilidad. Ya sea que vengas con dos o con diez, todo tu grupo se sentirá como en casa.

D. Leo

“Cada recámara es increíble, y las vistas al mar no tienen comparación, pero lo que realmente hizo el viaje fue tener espacio para pasar tiempo en familia. ¡Me alegra mucho que no nos quedáramos en un hotel!”

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